Muchos psicólogos, partidarios de la llamadaprogramación neurolingüística, defienden desde hace décadas que es posible saber si una persona miente gracias al movimiento de sus ojos. En concreto, si levanta la vista hacia la derecha, la teoría indica que no está siendo honesta, mientras que si lo hace hacia la izquierda, dice la verdad. Una nueva investigación publicada en la revista PLoS ONE asegura que esta afirmación carece de fundamento.
Los investigadores británicos Richard Wiseman, de la Universidad de Hertfordshire, y Caroline Watt, de la Universidad de Edimburgo, pusieron a prueba esta atrevida pero popular idea mediante la filmación de un grupo de voluntarios, al tiempo que mentían o eran sinceros sobre una serie de cuestiones. Después, sus movimientos oculares eran codificados. En un segundo estudio, a otro grupo de participantes se le pidió ver las grabaciones y tratar de detectar las mentiras sobre la base de los movimientos oculares de los voluntarios.